Los adolescentes de hoy son buenos conocedores de la tecnología, no se impresionan fácilmente y tienen algo de dinero para gastar. Si se añade a esa mezcla una buena dosis de tiempo libre, padres distraídos y una creciente industria electrónica, tiene usted una fórmula para una nueva forma de adicción: el escapismo. El escapismo puede tener muchas formas, pero aparece esencialmente cuando una persona evita participar en el mundo real y prefiere las actividades que aíslan y que no producen ningún beneficioduradero. Puede comenzar con los juegos de Internet, las novelas románticas o la televisión: en realidad es cualquier cosa que pueda llevar a alguien a evadir la realidad. En la sociedad de hoy, que busca el placer, el escapismo se ha transformado en una epidemia que mata la creatividad, el futuro y destruye las vidas. Lamentablemente, muchos padres no se han dado cuenta cuán dañino es el escapismo para la vida de un adolescente. ¿Es quizá porque a menudo nosotros mismos somos culpables? Mi esposa y yo observamos cómo casi destruyó a nuestro hijo Reese que entonces tenía 13 años. Al principio pensamos que los pocos videos que habíamos permitido en nuestro hogar eran estrictamente para relajarse y estudiar. Pero a medida que nuestro hijo se volvía irrespetuoso y agresivo, comencé a preocuparme seriamente. Lentamente empecé a ver como mi hijo motivado y creativo caía en una actitud de apatía. Por un tiempo lo ignoré, esperando que fuera solo una fase y que pasara pronto. Pero no sucedió así.
Ídolos encubiertos
Un domingo, escuché atentamente la predicación de nuestro pastor sobre los ídolos y me tocó el corazón profundamente. El Señor me mostró que los juegos de videos se habían convertido en un ídolo para mi hijo. Y al pensar en cómo iba a lidiar con la situación, me di cuenta de que la Biblia nos enseña cómo Dios lidió con los ídolos: ¡Mandó a su pueblo que los destruyeran por completo! Aunque es un concepto simple, resultaba duro aceptarlo y aplicarlo, pero decidí en mi mente y en mi corazón obedecer. Hablé con mi esposa Andrea sobre esta convicción y al principio ella no se mostró muy feliz con la idea. Todos los amigos de nuestro hijo jugaban juegos de video, y nosotros ya éramos conocidos por ser una familia cristiana conservadora. Además, Reese había gastado mucho dinero en estos juegos. Pero al día siguiente los escuché hablando. Andrea estaba diciéndole en una forma amorosa cómo los videos se habían convertido en un ídolo para él. Me uní a la conversación y le expliqué a nuestro hijo que le amábamos demasiado como para permitir que él perdiera su juventud en una actividad que podía arruinar su futuro. A pesar de solo tener 13 años, Reese era un joven duro, atlético y algo estoico, sin embargo sus lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. Señalé con mucho cuidado que esas lágrimas mostraban cuán seria era su adicción.
La senda de la recuperación
Después de orar juntos elaboramos un plan de acción para ayudarle. Decidimos comprarle toda su colección de juegos de video. Tomando el consejo de Andrea, ayude a Reese a usar el dinero que obtuvo por los juegos para comprar herramientas de taller y otros pasatiempos creativos a fin de llenar el vacío que se había formado en su vida. Las dos primeras semanas no fueron fáciles y empecé a preguntarme si habíamos tomado la decisión correcta. No obstante, lentamente nuestro hogar empezó a transformarse y también lo hizo Reese. Mis ojos se llenan de lágrimas al pensar en ello, porque nuestro hijo ha madurado y se ha convertido en un hombre con propósito. Al alejarse del mundo artificial de los juegos de videos, Reese ha renovado su compromiso con el Señor y su creatividad y pasión por la vida han vuelto. Cambió los entretenimientos sin sentido, por pasatiempos que estimulan su creatividad y le ayudan a cultivar los dones que Dios le ha dado. Él construyó modelos de buques, una guitarra eléctrica, cascos, espadas, un brazo robótico y otros varios proyectos excelentes. Y Andrea y yo recuperamos a nuestro hijo. Como padres, todos hemos visto como una actividad que parecía inocente se convertía en algo peligroso. Como padre de seis hijos, quiero decirle que usted tiene el poder para intervenir en este ciclo de escapismo en la vida de su hijo. Proverbios 4.23 nos advierte: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida”. La situación con Reese me mostró que puede que los hijos no tengan la sabiduría o la madurez para guardar sus propios corazones, y es nuestra responsabilidad ayudarlos hasta que ellos hayan madurado, en el Señor, lo suficiente como para hacerlo por sí mismos. Las buenas noticias son que cada vez que Dios nos pide que hagamos algo, Él nos capacita con todo lo necesario para llevarlo a cabo.
Pasos para los padres
En la sociedad que prevalece en nuestros días, los padres debemos, más que nunca, ser expertos en discernir los corazones de nuestros hijos. Pero ¿cómo lo lleva a cabo? Primero, ore pidiendo a Dios que le muestre lo que está pasando en el corazón de su hijo o hija. Luego, preste atención. Hay señales características que podemos ver cuando el escapismo se está haciendo fuerte en la vida de su hijo: Poco interés en sus amistades, descontento, apatía, pereza, pobre higiene personal, egoísmo, alimentación poco saludable e incluso depresión. Cuando sea necesario, actúe con una convicción amorosa, y llene el vacío con algo que sea bueno. Y por último, antes, durante y después de semejante confrontación, esté presente en la vida de su hijo. Una relación fuerte los fortalecerá para sobrevivir muchas tormentas. Estas acciones no son para padres de corazón débil porque requieren de firmeza, consistencia, abundancia de amor y voluntad de luchar contras las tendencias de la sociedad. Pero vale la pena hacerlo.
Chuck Black, un antiguo piloto militar e ingeniero de comunicaciones tácticas, es el autor de la series premiada del Kingdom y los Knights of Arrethtrae. Su pasión en la vida es servir al Señor Jesucristo y amar a su esposa Andrea y a sus seis hijos. Vive con su familia en North Dakota. Puede ponerse en contacto con Chuck en [email protected] o visitar su lugar en la Web kingdomseries.com